Por: Víctor Hugo Cárdenas Torres
Don Goyito, autoridad representativa del emblemático barrio San Camilo, acariciaba bonachonamente sus bien cuidados bigotes y se frotaba las manos en espera de la llegada del vecino notable don Micky Millones, quién había anunciado que en el día central de las fiestas de este pueblo, haría entrega de una importante suma de dinero para comprar el ansiado terreno donde construir el estadio del club deportivo "Amistad" el mimado de los lugareños.
Promediando las ocho de la noche, por fin, arribó don Micky Millones en medio de los atronadores fuegos artificiales surcando el límpido cielo y a los acordes de armoniosas melodías de la banda de músicos especialmente contratada para animar este acontecimiento.
Entre intermitentes fanfarrias don Micky Millones se confundió en un sonoro abrazo con don Goyito, expresando a voz en cuello:"he venido a cumplir con mi ofrecimiento, reciba Usted este sobre que contiene el dinero suficiente para que compren el terreno donde se construirá el estadio de nuestro querido club deportivo "Amistad". Con los brazos en alto recibió los aplausos agradecidos de la población.
El mecenas retomó el uso de la palabra:"Ah, y si el club "Amistad" necesita refuerzos para el equipo, pongo a disposición a cuatro de mis hijos para que entrenen a tiempo completo, ellos se dedican exclusivamente a la práctica del fútbol en la mejor academia de la ciudad" acotó.
Entre los enfervorizados vecinos que hacían largas colas para estrechar la mano del generoso donante, se encontraba Juan Mamani quién había trabajado por muchos años en la empresa del mecenas. Al llegar su turno se produjo el siguiente diálogo:
JM.- Don Micky lo felicito y agradezco por su valiosa donación a nuestro club deportivo "Amistad", por fín se va a hacer realidad el sueño del estadio propio, pero, me ha sorprendido escuchar que ha ofrecido a cuatro de sus hijos para que entrenen a tiempo completo con el equipo. Con el respeto que siempre le tengo don Micky, permítame preguntarle ¿sus hijos aún son menores de edad, no estudian?
MM.- ¿Por qué te preocupas mi querido Juan Mamani? Para que necesitan estudiar mis hijos si yo soy un hombre rico, con mi fortuna está asegurado el futuro de mis doce hijos.
JM.- Disculpe que discrepe con sus ideas don Micky. Ningún dinero garantiza el destino de la familia, recuerde que a diario se caen los más grandes imperios.Nada justifica que los hijos dejen de estudiar.
MM.- Mi querido Juan Mamani, cuando tu amases dinero como lo hago yo vas a cambiar de idea, el dinero lo compra todo.
Un año después, al conmemorarse un aniversario más del barrio San Camilo, ya no habían fuegos artificiales, ya no había banda de músicos, ya no se esperaba la visita de don Micky Millones. Don Goyito se encargó de explicar a los vecinos:" He tomado conocimiento que don Micky Millones ha caído en desgracia, sufrió un derrame cerebral que lo dejado en estado vegetativo, es decir, con todo el cuerpo paralizado, por lo que dejó abandonado sus negocios y han caído en la ruina. Su familia se encuentra en la miseria. Lamentablemente su esposa desconocía el manejo de la empresa y sus hijos desconocían todo por no haber estudiado" acotó acongojado don Goyito.
Mientras que los hijos del curtido trabajador del campo, Juan Mamani, están cursando estudios superiores en universidades estatales, destacando por sus altas calificaciones y proyectándose como futuros profesionales que aportarán al desarrollo del país, de su región y de la familia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario