¿SE VAN AL AGUA MILLONES DEL AGUA POTABLE PARA NUEVO IMPERIAL?

¡Alerta contra presuntas millonarias estafas!

OBRAS DE AGUA Y DESAGÜE DE LA FLORIDA

Y PUEBLO NUEVO DE CONTA EN ABANDONO

¿Por qué alcaldesa de Nuevo Imperial Zulma Matumay Santos, no se percató de la capacidad de liquidez de las empresas constructoras?

    En campaña electoral, la entonces candidata a la alcaldía de la Municipalidad Distrital de Nuevo Imperial, Zulma Marggina Matumay Santos, tomó como “caballito de batalla”, el escandaloso caso “Amauta” que denigró la gestión del burgomaestre saliente, Jorge García Quispe, porque significó la “pérdida” de casi 5 millones de soles que estaban destinados para ejecutar la obra de Agua Potable y Alcantarillados de la zona urbana de Nuevo Imperial. Matumay Santos dijo que no habría “borrón y cuenta nueva” y que los responsables de tan vergonzoso latrocinio irían a la cárcel.

¿MISMO “MODUS OPERANDIS”?

         Sin embargo, pareciera que ese mismo “modus operandis” se vendría  aplicando en la actual gestión edilicia de la auto-sobre-dimensionada y auto- híper -publicitada Zulma Matumay. Allí están los casos de Pueblo Nuevo de Conta y La Florida, cuyos proyectos de obras de Agua Potable y Alcantarillados, con financiamientos aprobados por el Estado, por cerca de 20 millones de soles, seguirían la misma suerte del delincuencial caso “Amauta”. E, incluso, ha trascendido que ante la serie de denuncias efectuadas por vecinos de Pueblo Nuevo de Conta y La Florida ante el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, como ante el Ministerio de Economía y Finanzas, estas últimas entidades podrían dejar sin efecto el financiamiento de dichas obras.

 CASO PARA QUE INVESTIGUE EL CONGRESO DE LA REPÚBLICA

           No siendo un hecho aislado en el distrito de Nuevo Imperial y, existiendo desconfianza en el comportamiento funcional del Ministerio Público y Poder Judicial de Cañete, al “investigar y sancionar” actos de corrupción, es menester que intervenga la Comisión de Fiscalización del Congreso de la República, amén de la Contraloría General de la República, para que investiguen exhaustivamente todo el proceso de estos Proyectos de Saneamiento en los referidos Centros Poblados nuevoimperialinos, por cuanto, trasciende extraoficialmente que, en las gestiones se habrían utilizado: tráfico de influencia política a altos niveles del Ejecutivo, pagos de prebendas por “gestión” y, designación direccionada para favorecer a determinadas empresas constructoras, sin capacidad de liquidez para garantizar la ejecución de las obras en referencia.

        Es más, hace algún tiempo, llegó a la Municipalidad Distrital de Nuevo Imperial, un Congresista de la República, para presidir una Audiencia Pública a pedido de los Regidores y vecinos  de la localidad. La intolerable alcaldesa tuvo que “tragarse los sapos” y acudir a dicha reunión, donde ella y sus funcionarios de confianza realizaron una exposición sobre las obras y gestiones logradas en lo que iba de su periodo edilicio, sin embargo, fue duramente abucheada y contradicha por los vecinos presentes en el auditorio municipal, quienes cuestionaron la calidad de obras y, sobre todo, consideraron sobrevaluadas algunas de ellas e, incluso, trasuntó que se habría hablado de algunas “obras fantasmas”, porque no las veían por ninguna parte.

           También, resultó sumamente contradictorio que, mientras Matumay Santos se ufanaba todos los días a través de medios de comunicación de ser “campeona” ejecutando obras, sin embargo, el portal del Ministerio de Economía y Finanzas la situaba entre las de menor capacidad en gastos de inversión pública, de las municipalidades distritales de Cañete. Es decir, puro bluf, pura publicidad, pura pantomima, pura demagogia de la más baja estofa. En síntesis, aquí tienen, la Contraloría General de la República y, el Congreso de la República, un patético caso de presunta impudicia que no debe quedar en la oscura impunidad. Tampoco, Nuevo Imperial, “Manantial de Agua y de Vida”, no debe seguir sufriendo de sed, por culpa de quienes confundirían el arte de gobernar, como el arte de hacerse “millonarios” de la noche a la mañana, con plata del Estado.